El Congreso del Estado de Tamaulipas ha aprobado una reforma a la Ley de Educación que prohíbe el uso de teléfonos celulares por parte de los alumnos en las escuelas de nivel básico durante el horario escolar. La iniciativa, impulsada por el Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional y presentada por la diputada María del Rosario González Flores, busca reducir distracciones y problemas emocionales entre los estudiantes.
Implementación y vigilancia
La reforma adiciona el numeral tres al artículo 88 de la Ley de Educación para Tamaulipas, estableciendo la creación de brigadas en cada plantel educativo. Estas brigadas, conformadas por maestros y padres de familia, serán responsables de promover acciones para evitar el uso de dispositivos móviles. El Congreso otorgó un plazo improrrogable de 90 días para que, una vez que entre en vigor la reforma, las brigadas queden conformadas y se encarguen de la vigilancia y cumplimiento de las reglas.
Apoyo jurídico y excepciones
Además, se brindará respaldo jurídico a las decisiones de las comunidades escolares para establecer lineamientos claros sobre el manejo de los dispositivos. Se permiten excepciones en casos de emergencias médicas o familiares.
Justificación de la medida
Durante su intervención, la diputada González Flores señaló los riesgos asociados al uso excesivo de estos dispositivos, como el bajo rendimiento académico, fatiga, falta de concentración y problemas de salud mental, entre los que destacan la ansiedad y la depresión. “El uso de la tecnología puede ser una herramienta poderosa para el aprendizaje; sin embargo, cuando su empleo no está regulado, puede convertirse en un factor de distracción y riesgo”, expresó en las consideraciones del dictamen.
La aprobación de esta reforma se da en medio de un debate nacional, en el cual algunos estados ya han implementado medidas similares. Por ejemplo, Querétaro fue la primera entidad federativa en prohibir el uso de celulares en las escuelas de educación básica y medio superior, tanto públicas como privadas, medida que entró en vigor el 20 de febrero de 2025.
Esta iniciativa forma parte de un esfuerzo más amplio para regular el uso de dispositivos electrónicos en las escuelas y promover un entorno educativo más enfocado y saludable para los estudiantes.
